Mujeres de negocios: herramientas para el crecimiento empresarial

En marzo conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, el momento ideal para recordar el esfuerzo de las mujeres por abrirse un espacio en el mundo y motivar a otras a perseguir sus sueños. Dentro de este grupo de soñadoras, muchas son mujeres de negocios que deciden emprender. Por eso, hoy las apoyaremos, facilitándoles información del mundo financiero que pueden tomar en cuenta para potenciar sus empresas.

Transformando desafíos en oportunidades

Históricamente, las mujeres han sido una parte fundamental para el desarrollo del sector informal del comercio. Son mayoría en este rubro y, por lo tanto, tienen una amplia experiencia y conocimiento empresarial fuera del sector formal. Las mujeres se enfrentan así a muchos retos que afectan su crecimiento económico; sin embargo, su ímpetu las empuja a transformar estos desafíos en oportunidades, a través de soluciones ingeniosas.

Para empezar, sobrellevar al mismo tiempo las responsabilidades familiares y las comerciales puede representar una dificultad adicional. Esto incluye las decisiones sobre si destinar los ingresos solo para gastos hogareños o si también para el crecimiento de la empresa. Es esencial mantener por aparte las finanzas personales y las del negocio, y no debemos asumir que las mujeres están atadas solo a las cuestiones personales, porque ellas también tienen aspiraciones laborales. Así, en la actualidad, existen diversas soluciones para que cualquier persona pueda adecuar su tiempo y dinero.

Hay productos bancarios, como las cuentas corrientes, que facilitan tanto a hombres como a mujeres el administrar un negocio sin sacrificar el tiempo con sus familias: son muy útiles para ahorrar tiempo, ya que se puede programar el pago de servicios; además, el dinero manejado por el negocio está seguro y al alcance de la mano, muchas veces con una tarjeta de débito ligada a la cuenta; igualmente, es una herramienta que evidencia el flujo de efectivo, haciendo que sea fácil rastrear los ingresos y egresos y ayudando a manejar mejor los presupuestos.

El plan para desarrollar el potencial de la empresa

El plan de negocios es un documento en el que defines tu proyecto empresarial: sus objetivos realistas, explicas el bien o servicio que comercializas, expones tu modelo de negocio y los recursos humanos y materiales con los que cuentas, elaboras un plan de marketing y una proyección de tu emprendimiento, y finalizas con una solicitud de financiamiento según tus necesidades. Si bien el plan de negocios no es garantía de éxito, sí es un medio que deja entrever el compromiso de la mujer con su empresa y que le ayudaría a aumentar las posibilidades de inversión. He aquí algunos tipos de financiación:

  • Línea de crédito para capital de trabajo: Es una herramienta financiera flexible que brinda fondos a las empresas, para gestionar las fluctuaciones del flujo de caja o los gastos operativos diarios.
  • Créditos para proyectos específicos y por etapas: Se puede acordar con el banco una financiación para subproyectos o para que la ayuda financiera se realice a medida que se avance en el proyecto.
  • Créditos hipotecarios: Es un tipo de préstamo a largo plazo en el que se toma como garantía la propiedad que se quiere comprar o remodelar.
  • Créditos para adquirir activos fijos: Usualmente se hacen préstamos de mediano y largo plazo para la compra de activos fijos, como mobiliario, transporte, maquinaria, entre otros, los cuales suelen pagarse según los ingresos de cada mes.
  • Leasing: A diferencia del préstamo bancario, el leasing o arrendamiento permite que la empresa utilice el bien por un largo tiempo y el banco le da la opción de comprarlo o renovar el préstamo al finalizar el contrato.

Las mujeres unidas transforman el mundo

Aunque pocas, en algunas instituciones existen programas específicos para financiar a las mujeres empresarias, ya que entienden que, como se mencionó al inicio, moverse en el sector informal afecta al récord crediticio de las empresarias emergentes. Esto nos hace darnos cuenta de que es importante fortalecer las alianzas entre empresarias, puesto que son un modo de combatir otros tres desafíos a los que se enfrentan las mujeres de negocios: la propia falta de redes de apoyo, la falta de modelos a seguir y los problemas con los socios.

Es un gran reto tener que enfrentarse a los socios comerciales, que muchas veces involucran problemas personales y una visión diferente del modelo de negocio, y a esto se suma la falta de referentes femeninas en el mundo financiero que ayuden a posicionarse a las demás. Para esto es que se necesitan las redes de apoyo o alianzas: las mujeres pueden hacer que sus emprendimientos colaboren entre sí para crecer juntas, pueden conseguir recursos fácilmente entre ellas, pueden realizar capacitaciones y, además, apoyarse en la visibilización de sus marcas en las redes sociales.

Habiendo aclarado todos estos retos, si eres una mujer empresaria, te motivamos a tomar los consejos que te beneficien para poder transformarlos en oportunidades; después de todo, las mujeres aportan una visión innovadora y creativas para los negocios, además de un enfoque inclusivo, lo cual es un esfuerzo por conseguir un mundo mejor.